Catapulta.me

Menú


Danos el último aliento, estamos casi al final de la carrera

Una campaña de Vania Malebrán

Danos el último aliento, estamos casi al final de la carrera

¿Cómo vamos?


    • 29
      Personas ya tienen su pack de esta campaña
    • $214,000
      De un total de: $1,600,000

    • 0
      seg restante
13 %
Danos el último aliento, estamos casi al final de la carrera

¡Hola a todos!

Primero que todo quiera agradecerles por darse un minuto para leernos, y por todas

las interacciones/cooperaciones que puedan ayudar a nuestra causa. 

Segundo, contarles que la historia que les compartiré pertenece a la persona más

importante en mi vida: Mi hermana. Su nombre es Gisella, tiene 35 años, es titulada en

gastronomía internacional, actualmente colabora de manera intermitente, pero

comprometida, en el lactario del Hospital San José, ahí prepara las papilas de los

bebés nacidos con complicaciones, además es una alegre mujer y por sobre todo, una

aguerrida y amorosa madre soltera. 





Lamentablemente hace un año y medio fue diagnosticada con mastitis granulomatosa;

una enfermedad inflamatoria de las mamas que consiste en múltiples abcesos y

granulomas, que en muchas ocasiones se confunde con un carcinoma. Normalmente

esta enfermedad reacciona bien a los tratamientos como antibióticos y corticoides, sin

embargo su caso resultó ser uno de los más agresivos vistos en el Instituto del Cancer,

razón por la que sus médicos decidieron proceder con la única opción posible: Una

mastectomía bilateral.




Esto fue el punto culmine de una racha de mala suerte de 5 años, donde tuvo que vivir

un solitario embarazo, el abandono de su hija por parte del padre, violencia intrafamiliar,

y una enfermedad que la mutiló tanto física, como espiritualmente.

Para los que sepan, y los que no también, la mastectomía bilateral es un shock, un

trauma, una amputación que transforma el cuerpo y la percepción que cada mujer tiene

de sí misma… para siempre.


Ojalá se pudiera conseguir que todas aquellas mujeres que deban atravesar este

penoso procedimiento, puedieran optar a una reconstrucción temprana, y así evitar que

el vacío de su pecho cale en su autotestima, pero lamentablemnte no es tan fácil.


¿El problema?

La reconstrucción mamaria, de acuerdo al AUGE, sólo está contemplada en casos

de cancer, y no en el caso de enfermedades benignas y crónicas, por lo que la

sanación queda sujeta a la capacidad adquisitiva de cada uno.

Y bueno, nosotras en este minuto no contamos con esa capacidad, por lo que estamos

detenidas en esta etapa del proceso, y dependemos de la cooperación del resto para

recaudar los fondos necesarios para los implantes mamarios.

Espero puedan comprender y empatizar con la urgencia de poder terminar este capitulo, llamado enfermedad.

¡Gracias de corazón!